El tiempo fue bueno para esquiar y disfrutar de la nieve: nevaba, frio (hasta -7C) y muuuuchaaaa niebla, esto último en algunos momentos nos impidio acceder a algunas pistas algo más elevadas y alejadas.
El sol solo se dejo ver unas horas para volver a desaparecer hasta el día que nos marchamos. Foto de los pequeños esquiadores y la madre que los parió.
La zona da mucho juego para el invierno, a parte del esqui alpino, tenemos cerca pistas de fondo y zona para travesias con raquetas atravesando un agradable bosque. Uno de los días optamos por alquilar unas raquetas y dar un paseo.
Todos con raquetas y yo con los esquis de travesía...hasta donde los niños aguanten!!!
Este es el tercer año que volvemos a esta pequeña y familiar estación de los Pirineos franceses, esperemos que no sea la última.
Haciendo "publicidad" de Els Voltors en todos los sitios (pegatina en el casco de Iván).
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